El Planeta de los Simios: Confrontación

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Puede que los últimos años hayan estado llenos de blockbusters mediocres, remakes innecesarios, secuelas tontas y filmes de Michael Bay, pero eso no quiere decir que Hollywood carezca de gente con talento que sepa cómo filmar buenas películas de grandes presupuestos. Uno de estos talentosos directores es Matt Reeves, quien con El Planeta de los Simios: Confrontación nos trae una secuela infinitamente superior a su predecesora, y el segundo blockbuster memorable que vi en la misma semana. Sí, fue una buena semana.

La película se desarrolla diez años después de la primera, y James Franco no aparece ni en pintura. (No, eso no es cierto, tiene un pequeño cameo en una grabación de video durante una escena particularmente importante a nivel emocional.) Los simios, liderados por el gran César (Andy Serkis) se han refugiado en un bosque a las afueras de San Francisco, y los humanos mantienen una pequeña ciudad improvisada no muy lejos de ahí. Sin embargo, en general la civilización humana ha colapsado y quedan muy pocos sobrevivientes; se trata de, en todo sentido de la palabra (¿frase?), un mundo post-apocalíptico. Los humanos sobrevivientes son liderados por Dreyfus (Gary Oldman) y Malcolm (Jason Clarke), quienes quieren devolverle la electricidad a su gente. Pero para esto tienen que aventurarse al bosque, en donde tienen que revivir una estación hidro-eléctrica. Al principio Malcolm logra crear una tregua entre simios y humanos, logrando entrar al bosque junto con un grupo de amigos, pero eventualmente los dos grupos se enfrentarán y una guerra comenzará.

 

OK, empezaré por lo que más intriga a la gente: ¿de verdad es esta película la prueba máxima de que sería posible hacer una cinta enteramente protagonizada por simios? Bueno, no sé si me atrevería a decir eso, pero lo que sí diría es que Confrontación tiene las actuaciones a través de captura de movimiento más convincentes y los simios digitales más realistas que jamás haya visto en el cine. César, Koba (Toby Kebell) y el resto de animales se ven impresionantemente convincentes, y en ningún momento uno duda de que son personajes, y no creaciones digitales. Cada movimiento, cada expresión facial del simio le pertenece al actor que le dio vida a través de la tecnología de captura de movimiento, y esto se nota a sobremanera en las actuaciones. El hecho de que los primeros 15 minutos del filme, en donde sólo aparezcan simios, quienes mayormente sólo se comunican a través de señas, funcionen perfectamente, debería ser razón suficiente para convencer a cualquier escéptico.

¿Pero de qué serviría tanta tecnología si la película no tuviese una historia decente? (De nada, y la prueba de esto es Transformers 4.) Felizmente el filme tiene un guión realmente bueno, y de hecho es refrescante ver un blockbuster que se preocupa más por contar una buena historia y presentarnos con personajes bien desarrollados que crear una nueva franquicia o dejar un final abierto para secuelas. No me tomen a mal, el final  nos deja con la expectativa de una secuela, pero lo importante es que no se siente incompleto ni gratuito. Además, me encantó el que la película complemente perfectamente a la cinta anterior; mientras que sin la existencia de Confrontación el final de El Planeta de los Simios: (R)evolución se sentía incompleto y apurado, ahora que la secuela ha salido las dos películas se sienten como una sola historia coherente. Por otro lado, también fue refrescante el tener una película “grande” que maneje ideas y conceptos interesantes, como las diferencias y similitudes entre hombre y “bestia”.

 

Las actuaciones son muy buenas. Como se mencioné antes, todos los actores que hacen de simios son excepcionales, especialmente (y predeciblemente) Andy Serkis, quien a estas alturas del partido ya merece, aunque sea, un Premio de la Academia Honorario. Por el lado de los humanos, Gary Oldman da una actuación sobresaliente a pesar de aparecer en relativamente pocas escenas, y Jason Clarke, aunque un poco apagado por partes, también convence. Las actuaciones secundarias de Keri Russell (quien se reúne con Reeves después de haber colaborado en Felicity), y Kodi Smit-McPhee (quien también trabajó con Reeves en su remake sorprendentemente decente de Let the right one in) completan un reparto de lujo.

A diferencia de (R)evolución, los humanos están igual de bien desarrollados que los simios. El Dreyfus de Oldman parece ser, inicialmente, un villano estereotipado, pero resulta ser un personaje sorprendentemente complejo, con motivaciones creíbles y una historia pasada trágica. El Malcolm de Jason Clarke es el protagonista “buenito”, pero que felizmente tiene suficientes conflictos internos como para no resultar aburrido. Keri Russell trabaja muy bien junto con Clarke, y hasta el Alexander de Smit-McPhee tiene un par de escenas donde resalta. En lo que se refiere a los simios, César es definitivamente el personaje más interesante, un líder fuerte pero a la vez bondadoso, quien todavía cree (hasta cierto punto) en los humanos a pesar de todo lo que ha sucedido, pero también tenemos a Koba, quien poco a poco se va revelando como un contrincante de temer.

 

A diferencia de otras películas “de verano”, la acción no es el foco principal de Confrontación; esta es una película de buena historia y diálogos importantes, personajes memorables y momentos emocionales. Sin embargo, esto no quiere decir que no haya acción. Una batalla campal entre simios y humanos (con ayuda de otros simios) durante el tercer acto del filme dura más de 20 minutos, y funciona perfectamente porque no satura, porque involucra personajes por los cuales nos preocupamos, y porque está expertamente filmada, de manera clara y llena de tensión. Eso sí, considerando lo verosímil y serio que es el resto de la película, la imagen de un simio montando un caballo, cargando una metralleta y saltando por encima de un mar de fuego resulta bastante… ridícula. Fue el único momento que me sacó de la ficción, pero supongo que no hay blockbusterHollywoodense sin momentos exagerados.

En fin, El Planeta de los Simios: Confrontación es una muy buena película, llena de personajes interesantes, un buen guión, una interesante historia, impecables efectos especiales y sobresalientes actuaciones. No se trata de una película hiperactiva que trata de atolondrarnos con explosiones y balas y peleas; la cinta se toma su tiempo para presentarnos con su trama y desarrollar sus personajes, y es precisamente por eso que funciona tan bien. Un filme con una premisa tan potencialmente ridícula como la de simios que poco a poco dominan el mundo (todavía no hemos llegado a ese punto, pero teniendo en cuenta el final, ¡falta poco!) podría resultar realmente mala bajo las manos del director incorrecto, pero con la dirección de Matt Reeves… terminó siendo uno de los mejores blockbusters del año. No toda mega-producción Hollywoodense tiene que ser una porquería como Transformers 4 de Michael Bay, y las dos películas que vi la semana pasada, Guardianes de la Galaxia y Planeta de los Simios: Confrontación son la prueba de esto.

Avance oficial:

88%
Puntuación
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